El síndrome del falso impostor es un trastorno mucho más habitual de lo que crees, siendo aproximadamente 7 de cada 10 personas la que lo sufren, aunque en muchos casos ni siquiera son conscientes de ello.
Si en tu día a día acostumbras a restar mérito a tus logros, crees que no estás capacitado para afrontar tareas o quitas importancia al esfuerzo que has realizado, debes saber que es probable que lo estés padeciendo.
Y, dado que se trata de un trastorno más común de lo que parece, pero que resulta desconocido para muchos trabajadores, hoy en Cucorent te contamos qué es el síndrome del impostor y cómo puedes reconocerlo.
¿Qué es el síndrome del impostor?
El síndrome del impostor es un problema psicológico que provoca que una persona crea que no está suficientemente preparado para hacer lo que hace, ya sea porque no es lo suficientemente inteligente, no tiene la formación necesaria o no es lo suficientemente creativa.
Esto deriva en que estas personas acostumbran a creer que el resto piensa que están mintiendo, lo que hace que se sientan constantemente observados y examinados, lo que afecta gravemente a su confianza.
¿Hay diferencia en el síndrome del impostor en mujeres?
Aunque los síntomas de este trastorno son idénticos en ambos sexos, sí que es cierto que el síndrome del impostor en mujeres es más habitual que en los hombres. Según diferentes estudios, se estima que alrededor del 66% de las mujeres lo padecen, por el 18% de los hombres, siendo la franja de los 34 a los 45 años en la que este síndrome afecta de manera más significativa.
Y, la causa más habitual en las mujeres que padecen este trastorno, es que tienen una excesiva presión al tratar de combinar la vida profesional con la personal, especialmente cuando son madres.
Los perfiles del síndrome del impostor más comunes
Los expertos en esta afección han especificado los 5 perfiles más comunes de las personas que padecen el síndrome del impostor en función de los hábitos o situaciones a las que se enfrentan en el día a día:
- El perfeccionista: son personas excesivamente perfeccionistas que se ponen unos objetivos demasiado altos y, en muchos casos, difíciles e incluso imposibles de conseguir. Esto provoca que constantemente sientan que no están a la altura y que tienen que hacerlo mejor.
- El experto: las personas dentro de este perfil son las que tienen la sensación de que han engañado a sus jefes o a la persona que los contrataron, y viven con el temor constante de que les descubran.
- El superhumano: estas personas se consideran farsantes y para tapar sus inseguridades, trabajan muy duro, cada vez más, lo que acaba siendo altamente perjudicial para la salud, afectando incluso a las relaciones familiares y a las amistades.
- El genio natural: este perfil se caracteriza porque creen que todo lo que hacen debe salirle bien a la primera, con el mínimo esfuerzo y con la mayor brevedad posible. Cuando no es así, se frustran enormemente y lo pagan con ellos mismos, trabajando una mayor cantidad de horas o realizando una cantidad de tareas superior a la que les corresponde.
- El individualista: el último perfil del síndrome del falso impostor es el del individualista, que son personas que creen que tienen que hacerlo todo de forma individual para no ralentizar a los demás y evitar que puedan darse cuenta de sus limitaciones.
Cómo saber si estoy bajo el síndrome del impostor haciendo un test
Una vez sabemos qué es este trastorno, te dejamos un breve test del síndrome del impostor que te permitirá saber si lo padeces o no:
1. Al realizar una tarea, ¿siempre crees que te has salido mal y te sorprendes enormemente cuando ves un buen resultado?
- Siempre.
- Normalmente.
- A veces.
- Nunca.
2. ¿Te obsesionas enormemente con cada tarea para que salga perfecta?
- Siempre.
- Normalmente.
- A veces.
- Nunca.
3. ¿Haces más horas de las que deberías en el trabajo sin que nadie te lo pida?
- Siempre.
- Normalmente.
- A veces.
- Nunca.
4. ¿Nunca pides ayuda cuando algo no te sale porque crees que es tu responsabilidad?
- Siempre.
- Normalmente.
- A veces.
- Nunca.
5. ¿Acostumbras a atribuir tus éxitos a la suerte?
- Siempre.
- Normalmente.
- A veces.
- Nunca.
Si la mayoría de respuestas han sido la A, es muy probable que sufras el síndrome del impostor, por lo que deberías comenzar a valorarte más y a confiar en tus capacidades. En ese caso, contar con ayuda de un profesional es altamente recomendable.
Si en cambio la mayoría de respuestas han sido B o C, puede ser que estés acercándote al síndrome del impostor y, aunque no lo padezcas, si no tomas soluciones, tienes muchas posibilidades de sufrirlo en un futuro próximo.
Mientras que, si tus respuestas han sido la D, significa que vas por buen camino, que confías en ti mismo y sabes valorar el esfuerzo realizado.